sábado, diciembre 22, 2007

Geografía

Futa, no cabe duda que estoy jodido.

Cuando era pequeño, noté que mis papás tenían unos libros grandooootes que formaban el llamado Atlas Universal Promexa (o algo así). El chiste es que estos libros, obviamente, traían información sobre países, divisiones políticas y ondas así de tooodos los países (de los que había en aquél entonces). Y, bueno, los leía y releía porque también traían un poco de geología y esas ondas tan interesantes.

Llegó un momento en el que me supe prácticamente todas los países, capitales y monedas del mundo (que venían en el libro) junto con algunas cosas interesantes de países, y, aunque casi no podía platicar con nadie de eso (tendría como 6 o 7 años o algo así y ninguno de mis compañeros disfrutaba de la geografía, por lo visto), sí pensaba mucho en eso. Me interesaba también eso de los ríos más largos, las montañas más altas... todas esas cosas me las fui grabando de a poquitos.

Ya después en cuarto grado me hicieron aprender más sobre México y me fui grabando igual montañas más altas y ríos más largos, ciudades más pobladas, estados con capitales; todo muy interesante.

El chiste es que hace rato no estuve seguro acerca de 4 capitales de estados (sí estaba bien, pero tuve que revisarlo) y de una no me acordé. Sí reconozco cada uno de los estados y me sé sus nombres, pero de las capitales no estuve seguro de todas.

Mal, muy mal. Pero por fortuna como nomás era cosa de averiguar que Pachuca era la capital de Hidalgo (ja, no sé cómo no me acordé si seguido paso por la carretera México-Pachuca, soy un baboso), ya recobré el dominio sobre esa información.

¿Qué tal creen que ande la gente en general de geografía, aunque sea de México?

Yo digo que muy mal.

martes, diciembre 11, 2007

Preguntas estúpidas y profesores estúpidos

Soy preguntón. De esos que se la pasan preguntando (o preguntándose) sobre las cosas; incluso sobre las cosas que parezcan muy triviales para la gente en general. Mi pregunta más usual es "¿Por qué?", pero me hago bastantes más preguntas.

Esto lo traigo desde chico, según recuerdo: normalmente veía cosas y ya me ponía ahí a medio pensarle, pero como no tenía mucha información mis respuestas no pasaban de conjeturas, cuando mucho. De ahí se sigue que cuando era chico preguntaba bastante más.

Es raro que me dé pena preguntarle a alguien sobre algún tema que me interese (que considere que la pueda contestar, claro). En muchas conversaciones informales siempre soy yo el imbécil que pregunta "¿y eso qué es?"; podría inferir la respuesta del contexto para no hacer tantas veces el ridículo, pero prefiero que las cosas me queden claras. En conversaciones ya formales, como se suelen explicar las cosas de las que se habla en primer lugar, no hago tanto esas preguntas. Pero si tengo dudas, ni modo.

En la primaria yo preguntaba bastaaaaante. Y en la secundaria. Y en la prepa. Y en la carrera. Normalmente preguntaba cosas que a mí no me parecían muy claras, pero a veces preguntaba como para ampliar la idea que había adquirido sobre lo que me acababan de enseñar. Sin embargo mi manera de ser, como ya he reseñado antes, hacía que la disposición de algunos profesores cambiara.

Sus actitudes seguían principalmente tres líneas:

- Los profesores pendejos que tomaban esas preguntas como insultos. Este tipo de profesores, en mi experiencia, traen por ahí frustraciones y traumas que les impiden ver que un chamaco baboso les está preguntando porque quiere que le queden claras las cosas, o aprender un poco más sobre lo que acaba de ver, no por creerse más que ellos (que creo que es lo que pensaban, pero a mí ni me interesaba eso). Digo, todos traemos nuestros problemas y todo, pero un poco de profesionalismo no estaría mal (o sea minimizar en la medida de lo posible esos exabruptos). Para eso les pagan, después de todo. No mamen. -- Me limito aquí a profesores de primaria y secundaria, digamos, cuando uno no puede adivinar muy bien por qué es que se ofenden cuando hace uno preguntas. Ya de más grande uno se da cuenta -aunque no siempre- cuándo estás hablando con un animal de esos.

- Los profesores profesionales. Estos sí contestaban a veces las preguntas bien si eran sobre dudas, pero se alocaban cuando les preguntabas conceptos que se salían ligeramente de la explicación dada. No digo cosas salidas del tema, sino que amplían los conceptos nomás. Otros que entran aquí son los que también contestan dudas pero si preguntas sobre otra cosa te ignoran o contestan que no es lo suyo (ni siquiera una explicación vaga, no pedía yo un curso completo tampoco). Como que pasas por su curso sin pena ni gloria.

- Los profesores chingones. Estos eran (son) los chidos. Les hacías preguntas y te las contestban rápido y con eficacia, para tampoco afectar mucho el curso de la clase. Aquí hay de dos: unos te contestaban bien, amablemente y todo chido y seguían con lo suyo; y otros te volteaban a ver con cara de "no puedo creer que seas TAN pendejo", y quizá te pendejeaban, pero te la contestaban igual chido y ya seguían con lo suyo. Había veces que no se acordaban o que el problema no les salía, pero decían "dame chance y al rato o mañana te digo" o "léelo en tal lado, está bien la explicación de ahí" y ya.

Huelga decir que para mí la gloria sería que todos los profesores fueran chingones, pero pues de todo hay en la viña del señor, como dicen.

He tenido suerte, hasta eso. Hasta antes de la carrera, la mayoría de mis profesores han sido entre profesionales y chingones, con varios pendejos por ahí; y ya en la carrera me tocaron prácticamente todos chingones, ningún pendejo y sólo un par de los profesionales. Ya en la maestría me han tocado todos chingones. Tiene sentido que haya sido así a lo largo de los ya veinte años que llevo en la escuela: entre más se va especializando alguien, es más probable que pueda responder preguntas y sentirse seguro de sí mismo sobre el área en que trabaja. Aunque en contra de esto está que los de primaria y secundaria tengo entendido que estudian para dar clases ahí, y por lo tanto también deberían ser todos chingones. No chinguen.

Cabe notar que los adjetivos que tomé son únicamente para el aspecto laboral, y los tomé de manera extrema --pero deliberada. Es decir, un profesor pendejo puede ser chido en la vida, y un profesor de los chingones puede ser un ojete. Pero pues como era chamaco ni modo que preguntarles "Qué onda profe, saque las nenas ¿no?". No les conocí fuera del aula pues. Además que lo que me interesaba más era lo que podía aprender de ellos, no si tenían 10 esposas y todas le odiaban, o algo así.
Y también escogí el adjetivo particularmente ofensivo "pendejo" para que si algún profesor se siente aludido por ello cambie su actitud. No digo que trate a sus alumnos con pincitas (por mí que los pendejee si quiere, y de paso que agarren carácter), sino que sea una fuente de conocimiento, por más pinche cursi que se pueda escuchar eso.

jueves, diciembre 06, 2007

Conteo

Uy, eso de decidir fechas siempre me ha costado mucho trabajo. Me refiero a responder preguntas del tipo: "¿Qué fecha es en tres días?".

Siempre comienzo pensando en la fecha del día en el que estamos y sumándole, digamos, tres (módulo 28,29,30 o 31 dependiendo del mes); pero inmediatamente después comienzo a dudar: "¿debí contar también el día actual y sumar dos nada más?".

Prácticamente en todos los casos en los que me preguntan mi primer razonamiento es el que da la respuesta que mi interlocutor buscaba, pero invariablemente titubeo y a veces mejor pregunto sobre mi duda. Soy así desde chico y no se me quita, aunque entreno con More Brain Training del doctor Kawashima :P

Lo que me lleva a esto de los números naturales. Los números naturales son los números que nos sirven para contar: empiezan del uno (algunos argumentan que del cero, pero la mayor parte de las personas que conozco -y me atrevo a decir que del mundo- empiezan a contar de uno así que voy a tomar el uno como el primero), de ahí le sigue el dos, luego el tres y así.

Cuando sumamos dos números (naturales), lo que hacemos normalmente es escoger uno primero y sumarle el otro. Puede sonarles estúpido, pero pues es la verdad. Lo pongo de esta manera porque en realidad al número ese que escogimos como el primero nomás le agregamos tantas veces como el segundo uno. Es decir que primero le sumo un uno al número original, de ahí a ese resultado le sumo oootro uno, de ahí a ese resultado oooootro uno y así nos la llevamos hasta terminar. Vamos a poner un ejemplo pa' que se vea qué quiero decir con esto:

Consideremos 5+3. Voy a escoger al 5 como el primer número, y le voy a sumar tantas veces como el segundo (o sea 3 en este caso) uno:
5+3 = 5+1+1+1 = 6+1+1 = 7+1 = 8.

La multiplicación (de naturales) también se puede poner en términos de sumar unos un montononal de veces.

Esto es una soberana guangada ¿no? Digo, eso nomás lo hace un niño de kinder con sus deditos y ahí sufriendo, pero nosotros que ya estamos grandes no necesitamos esas chivas ¿no?

Pues sí, sí las necesitamos, si nos interesa saber qué hay detrás de todo esto. Eso de ahí arriba lo puse para que vean la potencia que tiene sumar un uno. De manera un poco más payasona, en matemáticas a eso de la suma más uno a un número le llaman el sucesor de cualquier número dado (¡no mamen!). Y luego dicen que las matemáticas son difíciles :P

Hace muuuucho tiempo, en un lugar de Italia, nació un señor que de apellido Peano (no nació siendo señor, obviamente; no hay que ser), que un día tuvo la idea de dar unas reglitas que lograran capturar la esencia de estos famosos números naturales.
Estas reglas que dió ese señor (que yo me sé) son las de

- relación de equivalencia
- cerradura de dicha relación
- que no hay naturales antes del uno ( o sea que el uno no es sucesor de ningún natural)
- que si n es natural, entonces su sucesor también es natural
- si dos naturales tienen por sucesor al mismo número, entonces son el mismo natural
- (en este puede haber quejas) si un conjunto tiene al uno, y se satisface que si un natural está en el conjunto eso implica que esté en este conjunto su sucesor también, entonces el conjunto en cuestión contiene a los números naturales (principio, teorema -o axioma a veces- de inducción).

(Aquí no van a tener identidad aditiva porque no le puse el cero, pero de todas maneras las operaciones jalan poniéndolas como sumas de unos, según yo).

Me da risa que cuando le platico a alguien sobre estas reglas luego se me quedan viendo con cara de "no manches, ¡pero si eso es obvio! ¿Por qué pierden el tiempo con eso?". La cosa es que la mayor parte de la teoría (sobre números, al menos, pero hay más aplicaciones a lógica y cuanta cosa), parte de esas reglitas (la última es axioma en algunos sistemas). Y de esas reglas pues ya salen muchas cosas muuuuy interesantes.

Como algo curioso, vamos a ver eso del principio de inducción.

Seguramente han escuchado esa expresión "una no es ninguna" refiriéndose normalmente a restarle importancia a la cantidad de cervezas o copas o lo que sea que uno haya consumido para seguirle dando. Desde chico me causó mucha curiosidad porque al final siempre podía concluir que cualquier cantidad de cervezas era ninguna. Chequen.

Este ejemplo (bastante tonto porque 1 ciertamente es distinto de 0 normalmente) sirve para no subestimar la importancia de verificar el caso inicial y poner cuidado cuando uno anda de valiente usando inducción:

Como nos brincamos el caso uno (es decir 1=0... démoslo por cierto por flojos, o por borrachos), entonces veamos que si se cumple para n (o sea que n=0), entonces se cumple para n+1; en efecto, pues n+1=0+1=1=0. Por lo tanto hemos "probado" que cualquier número natural es cero.

En palabras esto sería similar a razonar "una no es ninguna, dos es una mas una, o sea una mas ninguna, o sea una, o sea ninguna... o sea que dos no es ninguna, pues" (estoy obviando eso de la doble negación en el lenguaje, no se me pongan muy mamones).

Ya estuvo suave de ñoñadas por hoy. Tengo que seguir con mi tarea de álgebra.

martes, noviembre 27, 2007

Entrenamiento

Tengo la costumbre de andar casi constantemente marcando ritmos con mis pies y mis manos, como si anduviera con una batería imaginaria. Víctor es el único loco que conozco que hace eso también (aunque debe haber más personas así).

Cuando iba en la prepa algún compañero me preguntó que por qué hacía eso. Le dije que porque me gustaba, pero -cuando pensé en ello- me dí cuenta de que podía extraer más cosas que el simple gusto de hacerlo: podía desarrollar coordinación entre mis extremidades, y ejercitarlas aunque fuera tantito --por poner ejemplos (malos).

Curiosamente, esta manera de ver las cosas admite generalizaciones; y fue así como en un ratito mi enfoque hacia mis actividades diarias cambió de manera drástica: las cosas que hacía me servían como entrenamiento. Las que hacía porque no tenía más remedio eran entrenamiento para que no fueran hechas en vano (además del entrenamiento inherente a la actividad), y las que hacía porque disfrutaba hacerlas eran entrenamientos para sacarles aún más jugo, y hacerlas más placenteras.

¿Entrenamiento para qué? Para quién sabe. "Para quién sabe", en efecto. Quién sabe si algún día voy a usar algo, así que quizá estoy perdiendo tiempo y esfuerzo.

Pero yo digo que uso todo, todo el tiempo.

Nomás que todavía me falla eso de aprovecharlo. Ahí de a poquitos.

martes, noviembre 13, 2007

Santa Clós

Una vez, cuando era chico, en una carta para ese ficticio señor escribí el saludo: "Queridos Santa Claus:".

Lo puse en plural porque me pareció natural suponer que, si terminaba en s el nombre que le ponían, debía ser consistente el saludo. Ríanse.

Cuando era chico mis papás me compraban juguetes en esas épocas. Recuerdo que lo que más pedía -y recibía- eran carros con control remoto. Lo malo de esto es que tenía una absurda tendencia a jugar unos días (a veces menos) con ellos, y después abrirlos para ver qué tenían adentro, y después dejarlos así todos desarmados. Lo que es no tener la capacidad de concentrarse en algo (para haberlos armado de nuevo).

Pero no es eso lo que quería expresar en esta entrada, más bien quería enfatizar este asunto de las fechas y épocas "importantes", y un poco mi (falta de) participación en ellas.

Primero están las observaciones obvias: muchas están instituidas oficialmente y, bueno, eso las distingue de manera objetiva -aunque sigan siendo arbitrarias. Pero hay otras que no, y esas son sobre las que la gente muchas veces protesta.

Y a veces protesta porque a muchos animales les gusta andar comprando guangadas. Pero molesta más porque es en esas fechas. Ajá.

Aquí hay una especie de esquizofrenia colectiva: hay fechas que -según he leído- no han sido motivadas por el consumo, pero que han sido aprovechadas por las empresas, y no son tan mal vistas; y hay otras que -según he leído- no han sido motivadas por el consumo, pero que han sido aprovechadas por las empresas, y y sí son mal vistas (me gusta hacer eso de poner dos veces lo mismo pero con pequeñas diferencias al final para dar un efecto más "¬¬").

La Navidad (creo que va con mayúscula) entra en la primera. Y el ese "día de San Valentín" en la segunda (aclaro que me limito a las personas que puedo observar más o menos de cerca).

Muchas personas que yo conozco pues son así medio listas y se dan cuenta de que las grandes corporaciones y todos esos se quieren aprovechar de ellos haciéndoles comprar cosas que son inútiles en casi cualquier métrica (remarco que el 'inútiles' no es lo mismo que 'innecesarios'), y no caen en ese "juego perverso", pero aun así se van y festejan la navidad porque pues es un día para estar con la familia o con los amigos o con el perro o con quien se deje. Pero a algunos (me atrevo a decir que la mayoría, aunque eso es irresponsable... y por lo tanto propio de mí) si les hablo de aquél otro día no mames soy un subhumano descerebrado sometido completamente al dominio del imperio del mal, sin siquiera considerar que aquél otro día puede tener otro significado para mí que sólo comprar chingaderas y salir con alguna(s) nena(s).

No hay que distraerse: no estoy diciendo que en efecto no soy un subhumano, simplemente que su postura me parece inconsistente.

Y, por lo que pueda valer, no soy de los que suelen participar en los días festivos (nacionales o extranjeros, por si les interesa). Sí, algunos sí los festejo pero es principalmente porque me están diciendo "anda, ven" o "anda, háblale a tal o cual persona", o porque se da por entendido que debo festejar y si no lo hago pues las consecuencias pueden ser menos que placenteras. Sigue un pequeño paréntesis:

Cuando iba en la secundaria, recuerdo, se estilaban hacer como buzones o un servicio postal interno de la escuela y lo repartían no recuerdo si en aquél otro día o fechas cercanas, y el chiste es que luego me mandaban a mí (¡¡a mí!!) cartas de esas de "me gustas" o equivalentes, pero anónimas. Como era un ojete (y jamás había experimentado el amor ¡aaaay! Jajajajajaja) en aquel entonces, obviamente me rehusaba a ponerles atención y me ponía rudo. Después -como se imaginarán- dejaron de llegar cartitas. Supongo que hubiera sido interesante que algún día hubiera llegado una chava no-anónima (bonita de preferencia :P) y me diera o dijera algo. Hablando de frustraciones, ja.

Regresando: sí me gustan -a veces- las fiestas y echar relajo. Sólo que hay fechas en las que presento resistencia, como aquél otro día. O el tan famoso Halloween. No tanto porque piense que "¡¡¡puuuuta cómo voy a participar en esa abominación, si yo soy más mexicano que el maíz (o lo que les guste)!!!", sino porque... pues... eso de los disfraces se me hace una mamada.

Lo que me lleva al punto al que iba a llegar antes de distraerme: En esas fechas festivas la única falla que ven a veces en la gente es esa. Que se pone festiva. Y que ponerse disfraces es ridículo y tonto. Y que el amor no existe :P

La cosa aquí es que volvemos a lo del consumo: para hacer una fiesta es útil (necesario, si quiere) bebidas, comida y cosas así. Pero eso involucra comprar y todo. Lo mismo si la ocasión "requiere" regalos.

Hasta aquí yo creo que alguien razonable diría "Bueno, pues si se trata de divertirse cualquier día es bueno, nomás no exagerar (y como comentario social responsable) ni olvidarse de nuestras tradiciones y etc.". Aunque no puedo evitar pensar que hay personas que dirán "noooo no mames si te sumas a una fiesta o algo ese día eres un bodrio". Espero que no.

Aquí me enfoqué en eso del consumismo, pero también está la línea de "porrrque no es mexicano, chingao", que suele ser tan mal usada como esta (obviamente hay gente inteligente que dice cosas pues... inteligentes, pero muchos nomás se quedan en lo que está entre comillas). Pero ésa esss ooootra histooooria.

Fíjense, toda esta parte la pude haber puesto como "el chiste es echar desmadre pero sin abusar, no se anden con mamadas".

domingo, octubre 28, 2007

aLdO eL InTeReSaNtE

La inconstancia es la única constante en mi vida.

I mean, siempre que me pongo a hacer algo dejo de hacerlo de manera instantánea. Si las paredes hablaran, darían cuenta de mis siempre interrumpidas acciones. La desidia se apodera de mí con una rapidez inconmensurable y mis proyectos sucumben ante sus fuerzas implacables.

***

Por si no se dieron cuenta esta entrada fue sarcasmo (el estilo de redacción, porque el mensaje -que escribiría normalmente como: "soy un pinche huevón"- sí corresponde a mí mismo). Intenté escribir una entrada larga parodiando a esas otras personas pero nomás no puedo... y no quiero, pa' qué me hago güey.

Aunque incluso la parodia me salió mal (me falta ejercitar mi dominio sobre palabras de más de cuatro sílabas). Valgo madre.

Ah, y eSo De EsCrIbir así es una pinche lata, no sé cómo le hace la gente... quizá ya está automatizado o algo.

Vocho

Desde chico he querido manejar un vocho. No sé manejar (aunque mi papá quiso enseñarme pero yo no quise), pero eso es aparte.

Supongo que cuando era chico como también estaba chico el carro y tenía lo necesario y no mucho más pues estaba bien. También influyó que fuera puro fierro y pareciera indestructible comparado con los demás carros (el que ví, los que hicieron después quién sabe).

jueves, octubre 25, 2007

Audífonos

Hasta hace como un mes, yo ignoraba el siguiente hecho sobre los audífonos (más bien los cables): Cuando un cable está más largo para un canal que para el otro (largo a partir de donde se separan), entonces ese se pasa por detrás del cuello para que quede como que colgando --brindando una serie de ventajas.

Lo que es no ponerse a pensar en las cosas.

domingo, octubre 14, 2007

Chipotes

Normalmente no escribo sobre cosas que me pasan en el día (o en mi vida), pero hoy me dí dos golpes en la cabeza, en dos viajes diferentes en distintos microbuses. Esos pinches tubos que ponen hasta atrás pegados al techo y alineados con la pared trasera del vehículo deberían estar prohibidos. Nomás espero que no me dé una embolia o algo así próximamente (todavía no decido qué directivas dejar si sobrevivo pero me quedo vegetal o algo así).

sábado, octubre 13, 2007

Disculpas

El otro día me puse a pensar qué onda con ese verbo: disculpar.

A veces uno dice "discúlpame", o "disculparse", y con esos no tengo problema; con lo que tengo problema es cuando se usa así: "pido disculpas".

No tengo problema por saber de antemano que está mal (de hecho no me quedaba muy claro... y aún dudaba), precisamente por lo contrario. Me puse a buscar en el diccionario y resulta que "disculpar" es un verbo que se usa de varias maneras: como dar razones que quitan la culpa a alguien de una falta, o perdonar las faltas de alguien; también venía una abreviatura que desconocía: prnl.

Leí que la abreviatura prnl. significa "pronominal". Pero como tampoco sabía qué chingados quiere decir eso, me puse a buscar y lo más comprensible que hallé fue que son los verbos a los que les puedes ayudar con un "me" o un "se" (ahí dice un pronombre átono) y jalan.

En este caso sería "disculparse", que viene a significar "pedir perdón".

Pero todavía no me quedaba claro eso de "pedir disculpas". La palabra "disculpa", según leí, es una razón que se da para excusar una culpa; siguiendo esta línea ¿no debería decirse entonces "te doy [las siguientes] disculpas"? Ah, pero también en el diccionario dice que "pedir disculpas" es "disculparse", que a su vez es "pedir perdón", por lo que todos salimos ganando :D

O sea que al final se puede decir "te pido disculpas" y "te doy disculpas", ya que pueden significar lo mismo (teniendo el cuidado de dar las disculpas en cuestión). Yo nunca me había imaginado que una disculpa era una razón para excusar de una culpa, francamente y a pesar de su obviedad.

No soy tan payaso como parezco con esto de las palabras, sólo cuando algo no me queda claro es cuando me aloco. Les pido disculpas (yaaaaa sabían que iba a haber un final intelectualoide/supermamón... nomás lo puse como parodia de esos artículos/entradas donde en verdad ponen esas estupideces... lo que me recuerda agregarlo a mis prejuicios).

domingo, septiembre 30, 2007

Got To Get You Trapped Under Ice

Advierto que esta entrada está muy larga (that's what she said! :P), pero nomás tantito.

Últimamente he andado medio nostálgico anhelante de tiempos-pasados-gloriosos-que-no-volverán, y además tenía rato que quería escribir sobre esta afición (más bien obsesión) que tengo a la música de los Beatles.

Decir que la música de esa banda me gusta es bastante poco descriptivo. Estamos hablando de horas, horas y horas de escuchar un cassete una y otra y otra vez, en lo que conseguía más canciones de ellos. Cuando había un especial en la tele de ellos (cosa rarísima allá en Coatza) a grabarlo; cuando en el radio los pasaban, pues ni modo, a escuchar los Beatles.

Estamos hablando de la única banda que me ha motivado lo suficiente para querer tener playeras de ellos (dos playeras que sigo usando hasta la fecha cada vez que tengo oportunidad, y que son casi las únicas prendas de vestir que he pedido porque me gustan). Ni siquiera Judas Priest ha logrado eso, y eso que sus playeras son de las únicas que me parecen atractivas como para traerlas encima (me gusta cómo se ven sus diseños y símbolos ahí macabros).

No recuerdo exactamente cuándo fue que escuché por primera vez la música de los Beatles -quizá fue desde que estaba en la panza de mi mamá, porque mis papás a veces ponían algunas canciones de ellos. Lo que ya recuerdo más claramente fue que cuando vivimos en Oaxaca, llegó a mis manos esa especie de compilación con disco doble de los Beatles; se supone que es de años ya más avanzados en su carrera o algo de ese tipo. El chiste es que me aprendí el orden de esos dos discos de memoria y las escuchaba una y otra y otra y otra vez. En esa época conseguí más canciones de ellos en cassetes y discos... y casi no discriminaba, en realidad. Prácticamente toooooooodas las canciones me gustaban, exceptuando únicamente You've got to hide your love away (que hasta la fecha sigo sin tenerle mucho gusto que digamos).

Digo, me gustaban también otros grupos y géneros musicales desde chico (el merengue, por ejemplo), pero comparados con los Beatles eran prácticamente nada. NADA se ponía delante del todopoderoso cuarteto de Liverpool (yaaa, me la jalé con eso jajaja).

Y pues así fueron pasando los años, y en la secundaria conocí a esta chica que me pasó más canciones de ellos: canciones que había visto por cachitos en videos y que por más que había intentado conseguir no había podido (cierto es que no me esforcé demasiado... mi obsesión consistía nada más en escucharlos casi todo el tiempo, no andar ahí buscando toda su música o algo así... eso vendría más adelante con el advenimiento de internet). Esta muchacha me regaló un cassette (ahora que lo pienso, no recuerdo si me lo regaló o si nomás me lo prestó... humm), y pues ya lo escuché un montón de veces.

Algo que recuerdo mucho de esa época fue que me dejaron una tarea de hacer unas fichas con información de los países: en cada una de ellas iba a tener que poner cosas básicas como su nombre, bandera, capital, población, etc. y un poco de los productos que exportaban, y algún comentario; y teníamos muchos atlas (¿atlases? No creo, ahí me dicen) ahí en la casa, por lo que la tarea -aunque laboriosa- fue muy fácil; y fue más fácil aún porque mientras la hacía ponía una y otra y otra y otra vez el cassette este con las otras canciones. Las que recuerdo que traía eran I need you, The night before, You're gonna lose that girl, All my Loving, Every little Thing, Eight days a week, It's only love, I've just seen a face, You like me too much, I feel fine... y son todas las que recuerdo que estaban en ese cassete.

Una observación muy vaciada es que, cuando no tenía que hacer tarea, me ponía a jugar Carmageddon (el primero, obviamente) mientras escuchaba esas canciones. Bastante mafufo eso, jaja.

Fue esos tiempos que comencé a escuchar Nirvana, Pantera, Metallica, Iron Maiden y -aunque mi gusto por la música de los Beatles no disminuyó- sí dejé de escucharlos como lo venía haciendo de muchos años atrás.

No es una exageración decir que su música es la forma de arte (si es que se le puede llamar así, luego hay gente estricta) que más ha afectado mi vida. Fácil. Y es por esto que escribo sobre ellos: no soy de los que escriben sobre otras personas, normalmente... y de hecho no lo estoy haciendo (la vida de cada uno de ellos en realidad no me interesa, nomás las canciones y un poquito el contexto en el que fueron escritas). Ustedes entienden.

El chiste es que hace poco, en mis andanzas por estos rumbos, me topé con esta banda llamada Beatallica que hace como que una fusión entre las canciones de Metallica y las de los Beatles -normalmente agarran la música de los Beatles y medio le acomodan la letra de canciones de Metallica. Y no te pases, me boté de la risa cuando escuché algunas de ellas. Voy a poner vínculos hacia sus canciones para que las escuchen; si saben de canciones de los Beatles y de Metallica, se van a botar de la risa como yo cuando las escuché (de hecho voy a poner unos fragmentos de las letras, no puedo resistir hacerlo).

Aquí están las ligas, en estas páginas están los álbumes con sus letras (los vínculos de descarga están a la derecha):

Su primer EP: A Garage Dayz Nite.
Su segundo EP: Beatallica.

Y cachos que me parecieron chistosos por ejemplo son:

You are in Hell, you're in a shell
Only ice iz what you'll find there
A frozen core, can't take no more
You'll freeze right out your fuckin' mind there

De Got to get you trapped under ice (la referencia debe ser clara si saben, si no... escúchenla de todas maneras, quizá les guste la canción aún así; lo mismo para todas las demás canciones).
****
I think I`m gonna be dead, I think it`s today
Electric wires pinned to my head, I`m frying away
I`ve got a ticket to ride
I`ve got a ticket to ride
I`ve got a ticket to ride the lightning

De Everybody's Got A Ticket To Ride Except For Me And My Lightning.
****
jajajajajajajaja esta está vaciadísima:

This happened once before
We smashed in your door—no reply
You said it wan’t you
But I put your head through your window


Y esta

I tried to telephone
Before I trashed your home—the strong survive
Cuz I know where you’ve been
And I will bash right in your door

Jajajajajajaja no "mamz". Ambas son de No Remorseful Reply.
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And when I punch you I feel happy inside
It s such a feeling, let the light-a-ning ride
Lightning ride, lightning ride

De I want to choke your band (no sé cómo se les ocurrió esta, son como Molotov en gringo).
****
So crank your amp and deal the pain
Hey, dude - you're fuckin' insane!
The rivers run red with blood of posers
And don't you know that he's the fool
Who plays it cool
But needs for his beer to be much colder

De Hey Dude.
****

Y es todo lo que tengo que decir acerca de eso. /Forrest Gump

miércoles, septiembre 26, 2007

Minimal

Rato de no escribir una entrada con título mamila sacado de matemáticas. Me estoy volviendo normal por momentos.

Para los que osan leer este bodrio de blog: noten el formato y contenido de este blog. Esto les sugiere cómo me gustan las cosas: me gustan las cosas simples, ya sea por flojera o por lo que sea, me gustan. No todas, pero definitivamente esta cosa es una de ellas.

Me pongo a pensar muchas veces por qué es que no ando adornando las cosas, y sieeempre concluyo que es porque no me dan ganas :P, pero no me dan ganas porque como que no le veo el chiste para nada. El cuarto donde he vivido los últimos cuatro años y cacho nomás tiene en las paredes cosas que han pegado otras personas: un póster de la Guelaguetza del '83 y dos dibujos que pegó el Ehe. Bueno, lo cierto es que también tiene unas cosas que yo pegué: cintas adhesivas, de esas bolsitas para la humedad (creo) y una nota que venían en una caja de una impresora y que no supe dónde poner... y que saqué hace 3 años y cacho (al final foto de evidencia de lo de la impresora).

Nomás una vez recuerdo haber pegado algo (quizá hubo más, pero no me acuerdo francamente): un artículo que venía en un periódico de Coatza que llevaba por título "100 maneras de saber si eres un borracho", jajaja. Me causó muuuucha gracia ese artículo y lo leía a cada rato. Lástima que después alguien pegó unas calcomanías encima de él. Y luego le cayó agua.

En fin, no he conocido una sola persona (que no sea yo) que no tenga algún ornamento en su cuarto o lugar donde habite. Y por ornamento me refiero a que no se haya puesto con intención adornar, y que no tenga otra función además de adornar, es decir, no guardar cosas o una mesa en forma de avión o algo así (aunque si pintaron o escogieron las paredes con decoración de naves o algo ya no se vale... pero si no las escogieron sí se vale) . ¿Alguno(a) por ahí?



Pa' que nadie salga lastimado mejor sigan las instrucciones, chamacos. No se coman esas bolitas.

domingo, septiembre 23, 2007

Ardiente

No sé si alcanzan a distinguir el hundimiento en la foto, pero esa cosa se calentó tanto que se fundió el plástico y se hundió. Y eso que nomás la dejé prendida como cuatro días seguidos. Me llevé el susto de mi vida porque se trabó la computadora y no quiso prender hasta que la dejé que se enfriara como una hora. Ya luego quiso prender pero el teclado no funcionaba, y así estuvo más rato. Pero ya luego funcionó perfectamente :D

Como alguna vez ví en los Simpsons: "Qué loco".

sábado, septiembre 22, 2007

Tu cara es estúpida

¿Nunca les ha pasado que han visto a alguien y nomás de ver a esa persona les molesta? No me refiero a que vean cómo se comportan, o qué hacen. Me refiero a que les ven la cara y es una reacción casi instintiva de repulsión (molestia, no asco). Enfatizo de nuevo que NO tiene que ver con cómo es el comportamiento de la persona, sólo cómo se ve (su cara nada más).

Pensando un poco más, creo que tiene que ver más con los ojos. O más bien el acomodo de los párpados. Hay personas que tienen los párpados medio caídos, y son de los que más provocan esa reacción. Pero no todas, conozco personas también con los párpados así y no me molestan en absoluto (o sea no les pongo atención, lo cual es normal). Humm... quién sabe qué sea en realidad.

Lo bueno es que hay muy pocas personas que detonan esa reacción. Ya soy lo suficientemente neurótico como para irritarme además por la apariencia de las personas. Tengo problemas.

sábado, septiembre 08, 2007

Cosquillas

Tengo la idea de que soy del tipo de persona que no suele ponerse triste. Me molesto, o me alegro, pero no me pongo triste así de andar cabizbajo y eso. Podría argumentar que me deprimo seguido, sugerido por mi omnipresente flojera, pero pues no es lo mismo, creo.

Aún así, las veces en las que de verdad me pongo triste son relativamente fáciles de identificar. Son como que descargas muy rápidas e intensas de tristeza, y el síntoma que las caracteriza son cosquillas. Seguro ustedes sienten lo mismo a veces (espero que sí, quiero sentirme normal de cuando en cuando): pasa algo gacho o algo así y sienten unas cosquillitas en las comisuras de los labios y áreas cercanas. Ugh, se siente medio gacho.

Pero lo menciono porque me parece curioso que una sensación tan definida como esa corresponda a las cosas tristes. Aunque, bueno, no se limita a cosas tristes, también incluye cosas gachas, ja. Ya luego le pregunto a uno de esos sabelotodos a ver qué me dice.

lunes, septiembre 03, 2007

Jajaja

We're the most efficient branch, cogito, ergo sum we'll be fine.

viernes, agosto 31, 2007

Vitaminas

Pues después de aproximadamente treinta horas ya me acabé el Final Fantasy VI, y la palabra 'majestuoso' apenas comienza a describirlo: los monitos, los escenarios, ¡la música!, todo es impresionante; es una historia que, aunque algo ridícula, es emotiva.

Trata temas como la amistad, ambición y esas cosas de siempre, pero incluso las cosas más trilladas o chafas se ven chido cuando son contadas de la manera adecuada. Y este juego se esfuerza bastante por contar su historia. No la pondré aquí, pero pues ya se pueden imaginar la jaladota que es.

Normalmente cuando termino este tipo de juegos 'ñoños' me siento bien. No me siento bien nada más por el hecho de haberlo terminado (aunque este me costó un montón de trabajo, me tardé todas esas horas incluso leyendo de cuando en cuando guías), más bien por los tópicos que se manejan en el transcurso del juego.

Algo así como cuando ví esa caricatura japonesa School Rumble, así como energetizado (o energizado, no sé cómo se dice... o si existe para empezar esa palabra :P) y con ánimos, esas cosas son como terapéuticas para mí.

Mi hipótesis es que esas cosas suplen la carencia de emociones 'ñoñas' en mi vida diaria, y por eso me agradan y me siento bien después de que pasan. Por ejemplo, en el juego un monito ya se pelea para salvar a otra monita u otros monitos y ya todos acaban felices y que la amistad y los monitos saltan y se ríen y cuanta jalada. Es chido. En otro lado un monito se muere (más bien lo dejé morir, porque no sabía cómo se podía salvar y pensé que no había manera jajaja), y la monita que estás manejando en ese momento se tira de un precipicio pero no muere, sino que valora su vida y cosas así. Cosas que te hacen, digamos, reflexionar y apreciar situaciones a las que normalmente uno no le pone atención.

Es doble: por un lado ves cosas que tienes en tu vida, y que no notas, y por otro ves cosas que no tienes -que te hacen sentir bien o mal- pero de las que siempre puedes extraer algo positivo de ellas.

Voy a poner una imagen pa' que vean la antigüedad que estuve jugando:

Aquí tenemos a Strong Bad, quiero decir Shadow, con el perro con mejor nombre que he leído jamás: Interceptor.

domingo, agosto 26, 2007

CF

Los relatos de ciencia ficción me parecen muy interesantes, y soy más o menos tolerantes a las diferentes tendencias que hay; no me pongo muy payaso si no es ciencia ficción hard, pero tampoco catalogo como ciencia ficción a las space operas (como Star Wars).

Como en todos los géneros literarios hay autores reconocidos y de los que se debe saber uno al menos sus nombres y haber leído uno que otro libro (y quizá detalles de sus vidas, pero no me privo tanto). Sin embargo de cuando en cuando surge por ahí un relato de algún fulano -quizá no tan famoso- que está interesante, o es divertido, o cosas así.

Es así como un día me topé con este relato. Léanlo, está muy entretenido (y es corto, para aquellos que no tienen tiempo/ganas/interés/cerebro).

jueves, agosto 23, 2007

Pendejos

Originalmente iba a escribir que lo único peor que un pendejo es un pendejo presuntuoso, mas la verdad es que hay más cosas peores.

Pero pues igual me encabrona que existan.

sábado, agosto 18, 2007

Esferas de poder

El otro día me puse a pensar sobre las personas que están en esas posiciones donde fijan, dentro de ciertos parámetros, las condiciones en las que vive mucho más gente.

Por ejemplo, gente en el gobierno y cosas así.

Y me puse a pensar que no mames. Es... raro. No lo veo desde el punto de vista de la justicia y la equidad y eso (eso es aparte), sino que cómo es posible que alguien me diga qué limitaciones tengo, a partir de sus caprichos y/o conveniencias.

Increíble.

EBA

Ah... quizá les parezca triste, pero hace unos días me fui a dormir con una sensación muy agradable, como si hubiera hecho algo verdaderamente chido... porque me acabé un juego.

Como cuando te gusta una chava y por fin se rinde a tu persuasión (suponiendo que en verdad la quieres, no que nada más te la quieres tirar). Quizá no es muy buena mi analogía porque tiene connotaciones sexuales y pueden distraerles de lo que quiero expresar.

El chiste es que durante unos días estuve jugando EBA, que es uno de esos juegos de ritmo (es en el Nintendo DS, por lo que le pegas a cosas con la plumita esa que trae). Al principio me iba muy mal, pero le agarré la onda y seguí practicando.

Eventualmente conseguí terminar el juego en normal y en difícil. Después de ahí viene la categoría muy difícil, que se parece a la difícil pero con los botoncitos esos para apretar al revés y con menos tiempo de reacción. Igual de a poquitos fui avanzando (ya no tan lento como antes, ahora sí podía más o menos rápido), hasta que me topé con la última canción.

Estuve como tres pinches días intentando pasar la última canción, que supera con creces a todas las demás en dificultad, en mi opinión. Lo bueno es que no está tan chafa como otras, y no se hizo tan tedioso. Por fin, el último día estuve como dos o tres horas intentándole hasta que pude ¡hasta que pude! Ahhh... y como ya eran como las tres de la mañana me fui a acostar, feliz como menciono.

No se dejen engañar: el hecho de que es un juego tiene poco que ver con mi complacencia. Lo que ilustra esta situación es que muchas cosas, no importa cuán difíciles o en apariencia imposibles, con práctica y constancia pueden ser realizadas.

La observación personal es que debería tener la misma determinación para las cosas que no son juegos, pero el mensaje que quiero transmitir trasciende esa particularidad, y es útil recordarlo cuando uno está por tirar la toalla. Todo está en querer, normalmente.

domingo, agosto 12, 2007

Música

Esta es mi última entrada de hoy, en serio.

Hace rato me topé con este video. Chéquenlo, a ver qué opinan.

Duro de doblar

Bueno... acabo de ver Die Hard (tenía mucho que no la veía... para ser sincero casi no la recordaba, y de hecho no me acordaba que Alan Rickman es el malo, y es difícil quitarse la imagen que esos bodrios de Harry Potter me han dejado), y no es tan mala. Cierto es que está repleta de jaladas y el final es un bodrio, pero no es para tanto. Lo que sí es que sentó precedentes para que se hicieran más películas (chafas) de matazón.

Eso de que un fulano policía esté en el lugar equivocado en el momento equivocado es una mamadísima, pero es una mamadísima entretenida. Es más jalado aún que el tipo en cuestión se aviente a casi todos los malos, pero al menos en la primera mitad no lo hace de manera chafa. Lo que sí es que tiene demasiada suerte para que no le den las balas... supongo que por algo le pusieron 'Duro de Matar'.

Y esta elección de título traducido es una muy buena, en mi opinión. Me gusta mucho más cómo se oye 'Duro de Matar' que 'Die Hard'. Normalmente estoy en contra de las 'adaptaciones' que hacen de productos de entretenimiento de otros lugares, pero en este caso me parece muy bien.

Los doblajes, por ejemplo, también me molestan bastante normalmente. Y me molestan bastante por dos cosas principalmente: una es que los chistes o referencias no sobreviven a la traducción (y me interesa muchas veces qué chistes hacen en otras partes del mundo), y otra es que los actores que doblan parece que hacen el esfuerzo rutinariamente de estar tan desprovistos de emoción o inmersión en la escena como les sea posible. Luego está el fulano gritando por ayuda o un insulto y la voz se oye 'oh, diablos, necesito ayuda'. Espero que mis detractores noten que no me estoy limitando a trabajos en inglés, sino de cualquier idioma que no sea español: la otra vez ví una película brasileña en la versión doblada y la versión 'normal', y la diferencia fue de si mamas no te cuelgues.

Por supuesto -POR SUPUESTO- hay excepciones a esto, y la más significativa de ellas para mí son Los Simpsons. ¿Alguna vez los han escuchado en sus voces originales? Qué bodrio. Y la diferencia se acentúa más cuando tomamos en cuenta que la adaptación (o sea alteraciones en los diálogos) los hace más hilarantes, en mi opinión.

Supongo que lo mismo se puede decir de libros y otros medios, pero en las películas se VE que el cabrón está gritando (o abre un chingo la boca para hablar) y el fulano que dobla, de nuevo, está 'oh, diablos, necesito ayuda'.

Además, si comienzan a leer libros en otros idiomas -y le ponen interés- pueden comenzar a aprender esos idiomas, lo que a su vez les permite modificar esquemas mentales: la otra vez me dijeron que los que hablan alemán piensan en los tiempos a lo último, o algo así. El chiste es que aprender nunca está de más.

Claro que les sugiero seleccionar obras con mayor cuidado que el que yo tengo: Die Hard difícilmente es algo que recomendaría para aprender inglés, de igual manera que ビジターQ no es algo que recomendaría para que aprendan japonés, por poner un ejemplo (no -repito: NO- vean esa película si se consideran gente 'normal'. En serio).

Edit: se me olvidó poner frases chistosas de la película, como

- Attention, whoever you are, this frequency is reserved for emergency communications...
- No fucking shit, lady! Do I sound like I'm ordering a pizza!?

Jajaja.

Ñero

Las modas van y vienen. Las masas las cambian constantemente.

Pero las modas en sí no son uniformes, entre las diversas subculturas los estilos van cambiando y lo que hoy era 'punk' antes quizá no lo era tanto.

El chiste es que me acordé de ese corte con el que tanto se identificaba a los ñeros* (en particular los choferes de microbuses), que es corto por todos lados - menos atrás, donde es largo- y mi sorpresa fue enorme al darme cuenta que este corte tiene sus nombres populares en un montón de lugares (están hasta abajo), y no sé cuál sea el de México.

Quizá en la jerga de los peluqueros y eso tienen un término, pero algún nombre común, no sé ¿alguien me ilustra?


*Estoy usando este vocablo por convención. Espero nadie se ofenda

lunes, julio 30, 2007

English

Me había resistido a escribir sobre esta entrada porque no habían llegado los resultados, pero ya estuvieron:

Para ingresar a la maestría en FM te piden un examen conocimiento de lengua extranjera (inglés, en este caso). No sé exactamente por qué, pero te lo piden. Lo curioso es que te piden como ciento y cacho pesos para inscribirte al examen de inglés . Me reservo mis comentarios sobre el tener que pagar tanto dinero para un vil examen.

Me confié para el examen, francamente. Lo que sucede es que fue un examen de comprensión de lectura, o de lectura de comprensión, o algo así le pusieron a la hoja, y yo de manera diaria desde hace ya varios años entro a esta, esta y esta página. Y pues leo ya los comentarios y noticias que pongan ahí (ya saben ahora mi secreto para aprender inglés... y perder aproximadamente un cuarto de mi tiempo total de vida durante estos años). Es por eso que no estudié y pensé que el examen sería sencillo. Y sencillo fue.

Llegué el día indicado al examen -si mi memoria no me engaña, fue un jueves... o... la verdad no me acuerdo bien- y me dirigí a donde debíamos entregar la ficha donde decía que habíamos depositado la lana en el banco. Pero la cosa no podía ser tan simple, obviamente, así que tuve que hacer cola durante unos cinco minutos para que me tocara entregar la ficha y que me dijeran que tenía que pagar otros ciento y cacho pesos porque habían cambiado la tarifa. Para esto ya había llegado un poco tarde: el examen empezó a las diez y eran en ese momento las diez y diez.

Quiero comentar brevemente sobre esto de la impuntualidad mía. Es muy sencillo, en realidad: normalmente cuando tengo que llegar a una determinada hora a un lugar (en la mañana), me despierto de tal manera que me dé tiempo de llegar de un cuarto a media hora más temprano. La cosa es que en lo que me baño y visto me distraigo mucho (me pongo a leer, me pongo a jugar, me pongo a pensar) y es ahí donde se me va el tiempo de reserva, y el tiempo normal. Voy a buscar una manera de corregir eso... luego.

Seguimos con lo de la cola: me dijeron que podía presentar el examen y después ir a pagar inmediatamente la diferencia que debía y no había problema. Cuando entré al salón (porque no sabía dónde era) eran ya poco más de las diez y media.

El examen lo hice como en diez o quince minutos. Fui el segundo en salir, creo. De ahí me fui a sacar copias de mi credencial de elector y las traje en la mano de ahí en adelante. Estaba alegre porque pues eran claras las respuestas y todo -según yo.

Pero no, resulta que había otras interpretaciones que parecían al menos aceptables. Y esto me lleva a un tema muy importante: la ambigüedad. Normalmente uno no habla con precisión, sin embargo la gente se entiende y rara vez ocurren malos entendidos significativos ¿Por qué? He llegado a la conclusión (que parece obvia) de que no pasa eso mucho por que se establecen ciertas convenciones implícitas en el lenguaje. Uno no anda estipulando a qué se refiere con determinada palabra a cada rato, simplemente uno habla o escribe y ya. Y esto fue lo que asumieron las personas que hicieron ese examen.

Para mí es un poco complicado, y se agrava cuando es un examen que potencialmente puede frenar mi avance académico. Me gusta que la gente hable de manera consistente y con cierta precisión (aunque en conversaciones intrascendentes soy laxo). Lo achaco a que de por sí soy mamón y aparte súmenle que estudio matemáticas.

Entonces, me dí cuenta de que las respuestas que yo había dado se parecían cada vez menos y menos a lo que alguien 'normal' hubiera puesto. Pero que eran consistentes, al menos. Triste consuelo. Estaba echando chispas y algunas personas tuvieron que soportarlo. Y pues a esperar a que llegaran los resultados... en dos semanas o algo así.

Para cuando ya medio me había controlado, estaba con Eric en el banco pagando esa chingadera y de ahí nos regresamos para entregar la otra ficha. La entregamos y todo muy bien. La señora me entregó el recibo correspondiente, conversamos no recuerdo sobre qué, y salimos de ahí para entregar ese una copia de ese nuevo recibo a otra oficina.

Mientras subíamos las escaleras para llegar a la otra oficina le iba comentando a Eric que debíamos cambiar la imagen que tiene la gente de los matemáticos: mucha gente piensa que los matemáticos están locos, y que son despistados y nerds. Muchos lo son, sin duda, pero el chiste es cambiar la imagen, no a los matemáticos.

Mi plan para cambiar esa imagen es muy simple: Como ya estoy greñudo, simplemente me compro unas botas esas de motociclista, uso chamarras de cuero, tatuarme y ponerme roquerón. ¿Cómo ven? ¿Cuántos matemáticos roqueros ojetes hardcore conocen?

Eso le decía a Eric en lo que llegamos a la otra oficina y entregamos el papel. Íbamos saliendo cuando me dí cuenta de que mi recibo (el original) no estaba. Y ahí nos pusimos a buscarlo en mi mochila, entre mis pornos apuntes, y nada. Nos fijamos en el piso, y nada. Nos regresamos a las dos oficinas y nada que estaba. Hasta hice que una de las señoras se regresara a abrirnos la puerta para que pudiéramos buscar el pinche recibo, y nada. Ya estaba al borde del colapso nervioso cuando revisé las escaleras donde había estado diciendo mi plan... y nada.

Para no hacer el cuento (más) largo: resulta que, mientras le decía mi plan a Eric de volverme roquerón ojete hardcore, dejé caer el recibo inadvertidamente y algún buen samaritano lo recogió y lo pegaron en una ventanilla en la entrada del edificio.

Ja, soy malo ¿no?


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Ah, por cierto, sí pasé el pinche examen ese. Y usé la palabra 'examen' unas 1000 veces en esta entrada.

sábado, julio 21, 2007

Apodos

Ayer me estaba acordando de la secundaria, y me acordé de algunos apodos de compañeros y maestros. Veamos algunos de ellos (todos van precedidos por su respectivo artículo personal):

Achú, andros, topo, chupetes, sarape, haragán, cepillín, tamagochi, chilletas, bombero, bábidi, chícharo, pacho, costeñito, orasonso, ñoño (y variantes), nalgas (usado una vez), caballo (usado una vez), charrito, botas, teca, borrega, molusco, loca...

Y más, nomás que ya no me acuerdo, y traigo la presión baja. Ya luego los pongo.

martes, julio 17, 2007

Cuentos

Desde hace un rato traigo ganas de escribir algo así como un cuento. De chico recuerdo escribí algunas especies de historias todas chafas, y en secundaria algunas un poco más estilizadas, pero igual chafas.

Hoy en día siento que tengo algo más de habilidad, y una que otra idea para una historia (igual de chafas, imagino). La cosa que me ha impedido escribir esta vez no ha sido la flojera, me temo.

Es que me molesta escribir cosas como '*****, intrigado, contestó...' o ese tipo de mamadas. Siento que no son naturales. Tampoco pido algo completamente como uno habla, pero sí más inclinado hacia eso. En todo caso, voy a acabar escribiendo algo en forma de bitácora --me parece la mejor oportunidad para escribir de manera 'natural'. Vamos a improvisar a ver qué sale:

/*inicio del relato*/

Hoy estuve sentado en mi escritorio desde la mañana. Sí, no en la silla, sino en el escritorio. El gorila salió de viaje así que me quedo a cargo de la oficina y puedo hacer lo que yo quiera. Pasado mañana haré por fin mi pinche viaje pospuesto tantas veces: ir con Catarina a Villahermosa. Está muy cerca, lo sé, pero por el momento no tenemos tanto dinero como para ir más lejos, y tengo que aprovechar los días que me darán en el trabajo.

Se portó bien esta vez el gorila dejándome unos días escaparme de esta pinche rutina. La otra vez me preguntó:

- ¿Eres feliz?
- ¿Es joto, señor? (Bueno, esto no lo dije, pero lo pensé) ¿A qué se refiere?
- A si estás satisfecho con este trabajo, pues. Te veo como que con hueva todo el tiempo.
- Pues... por el momento voy a esforzarme para que la compañía salga adelante, y pues si se puede un ascenso o algo así (risa nerviosa).
- Ah.

No sé qué respuesta esperaba: no conozco a nadie que le guste estar todo el pinche día todos los pinches días capturando información, yendo y viniendo con mensajes y explicándole a una mujer furiosa que su gorila va a llegar tarde porque tiene una reunión, o algo así.

Y pues ahorita ya casi es la hora de la salida para comer. No sé qué voy a comer esta vez: tortas o tacos. Estos güeyes quieren comer tacos, y pues yo también, la cosa es que ya comimos ayer y no me cayeron muy bien que digamos. Pero estuvieron buenos. Lo que sí es que ya estoy bien gordo, puta madre. Siempre he sido gordito, pero ahora sí me estoy pasando de galleta, ja; y es que cuando corro no siempre corro todo el rato, así que me voy a quedar choncho un buen rato. Ya luego bajaré estos kilos.

Deveras que no sé cómo le hace ese pinche Juan para mantenerse tan flaco, chingao. Ese cabrón traga más que yo y mira, parece una pinche calavera (al lado mío, al menos) todavía.
Dice unas madres que el microbolismo, o algo así, que sus genes y no sé qué tantas chingaderas. Se la pasa leyendo sus revistas de gente sana. Qué pinche hueva me dan sus

Ya llegaron estos animales, me voy a comer.


/*fin del relato*/

Como pueden ver, no me salió muy bien. Todavía está muy estilizado y mis personajes están como que entre inexistentes y chafas :P. Pero pues qué querían que hiciera en 12 minutos.

lunes, julio 16, 2007

Jueguitos

Normalmente no me emociono demasiado con los juegos de video. Digo, me emociono al jugarlos y todo, pero busco ser discreto y fingir que no me impresiona mucho (personas me dicen que 'ya estoy grande')... pero hay veces en las que la experiencia es taaaan chida que no puedo seguir con mis farsas.

Cuando era chico, me pasaba mucho más a menudo. Recientemente puedo recordar una: la vez que escuché 'You've got another thing comin'" en Prey.

Acaba de pasar otra.

Los juegos de carreras normalmente no son lo mío. Lo mío es matazón y matazón y explosiones (Carmageddon merece una mención especial al combinar lo que me gusta y lo que no tanto), pero pues también a veces quiero variarle y aventarme unos de carreras que veo que se ven espectaculares. Apenas jugué Burnout 3 y estuvo muy chido, salvo por la abominación de soundtrack que traía. Qué pinche bodrio.

Hace rato instalé Flatout 2, que muchos dicen que es inferior a Burnout y no sé qué tanto, y en el intro -mientras agarraba forma el video- comenzó a sonar Demon Speeding. Y después, a la hora de la primera carrera, que me toca Demon Speeding.
Asssssu máquina, estuvo poderoso eso.

Ya, ya se me bajó la euforia. Quizá luego comente sobre el juego :P

Serios

La gente se toma muy en serio.

No tengo problema con eso, para nada. Cada quién tiene sus preferencias y si les gusta tomarse en serio, pues qué chido. Yo prefiero no hacerlo, simplemente.

Lo que me desagrada es cuando las personas afirman que no lo hacen, y cuando hablas con ellas o sostienes una conversación comienzan con comentarios que te hacen dudar de sus señalamientos.

Quizá este burdo análisis podría ser ampliado a otros objetos además de las personas (probablemente en un intento de antropomorfizar a las cosas que nos rodean).

Sí, ya no se me ocurrió nada más :P

EDIT: Bueno, pensándolo bien, sí tengo problemas con que la gente se tome en serio, pero no tanto como si dicen que no y sí :P

lunes, julio 02, 2007

Morbo

Si me preguntaran si soy morboso, contestaría que no. Bueno, que no mucho. Bueno, quizá sí, pero un poco. Mejor dicho lo normal. Un chingo.

Todas estas respuestas serían válidas, dentro de contextos definidos para cada una de ellas. Y eso que me limito a una acepción de la palabra.

Y es que hay veces en las que uno simple y sencillamente tiene ganas de observar algo. De repente te llega un impulso que te hace voltear, aspirar, acercarte o acciones afines para poder apreciar cualquier espectáculo que sea el que nos interese (normalmente lo asociamos con algo vomitivo, pero no es necesaria esta propiedad).

A la hora de por fin sumergirse en la experiencia mórbida, se satisface nuestra necesidad y nos sentimos aliviados. Pero no siempre podemos obtener eso, y -al menos en mi caso- se olvida y se sigue adelante. Si no pudiste ver cómo le mochaban el brazo a un tipo, o se quitaba el sostén una fulana, o un sujeto guacareaba o algo así ¡no importa! No me voy a morir si no lo veo, y de hecho bien podría verlo más adelante.


Pero me hubiera gustado ver :P


Es así como antier me ganó el morbo y fui a intentar ver la de Harry Potter. Les pido disculpas por mi comentario escatológico y la ofensa potencial que acarrea. Digo intenté porque, aunque estaba anunciada en la página del cine, no me fijé que decía preventa. Ni modo. Acabé con mi morbo sin saciar, y tuve que conformarme con ver esa película de Ocean's Thirteen, o como se llame.

Estoy haciendo un poco de trampa aquí. Dije que el morbo es un impulso, o tener ganas de observar algo. En este caso no me llegó nada más porque sí, sino que vi la anterior (de nuevo les pido disculpas) y me llamó la atención que un tipo pelirrojo es un poco cruel con las nenas, pero hay una especie de romance ahí y cuanta mamada. Esto me llama la atención y es por eso principalmente que quiero verla (el por qué me llama la atención será discutido en otra entrada que tengo planeado escribir pronto). No me interesa si Vorador se come a los papás de Harry o lo que sea.


Y sí, ya sé que el malo no se llama Vorador. ¿Y ustedes saben quién es Vorador?

Eso pensé.

sábado, junio 23, 2007

Ternillas

Quizá alguno de ustedes han escuchado la expresión "desternillarse de risa". Yo la he escuchado y leído varias veces, lo raro es que la escuché y leí nada más cuando era niño.

Pero quizá no saben que eso de desternillarse quiere decir romperse las ternillas --y una ternilla no es otra cosa que un cartílago. En esta expresión se refiere principalmente a las de la caja torácica (costillas, esternón, columna) y hace alusión al movimiento ese medio loco que nos agarra cuando nos reímos mucho.

Me considero una persona que se ríe con facilidad (a pesar de que siempre ando con mi pinche carota). No me pongo demasiado exigente para reírme, pero he notado que soy más sensible a ciertas cosas, como lo son: cosas sorpresivas, cosas ingeniosas, groserías.

He leído que existen un montón de estrategias (estilos, les dicen) para decir y escribir cosas que le causen gracia a la gente, y he leído sobre algunas de ellas (principalmente para poder darme cuenta de qué específicamente es lo que me hace reír). Me he topado con cosas bieeen mafufas y muchos conceptos literarios que vienen desde los griegos y cuanta cosa.

El chiste es que así a veces disfruto más las bromas que leo o escucho. Y si de por sí me boto de la risa con facilidad, pues más. Ya lo he mencionado, pero una vez hasta me vomité de la risa (nunca me he orinado o algo así... aún). Han habido más veces en las que me salen lágrimas de la risa, y todas involucraron un dolor intenso abdominal y de pecho.

Hace unos minutos fue una de ellas.

Pocas cosas llaman más la atención de las personas que burlas ingeniosas de algún objeto. Un ejemplo (aunque no muy ingenioso que digamos) que quizá conozcan es ese programa que pasan (o pasaban, llevo 4 años sin tele y lo poco que la veo cuando voy a Coatza veo porno documentales y películas) que se llama(ba) Otro Rollo, donde un fulano se paraba enfrente de una cámara y comenzaba a mofarse de cualquier cosa. Creo que es(era) un programa popular.

En fin, la cosa es que ese tipo de programas ganan popularidad en la medida del ingenio del protagonista en cuestión. Claro que hay diferentes personas y lo que le puede parecer ingenioso a una puede no parecerle a otra. También hay diferencias en gustos, por lo que -por más ingeniosa que sea la burla- si el objeto burlado no le interesa al público, la burla no les causará gracia.

Además de esto de las burlas hay los insultos. Los insultos -justificados o no- tienen también cierto grado de atractivo para el público general. Combinen las dos y tienen una potencial bomba.

Al menos para alguien tan estúpido como yo, claro.

No sorprende, entonces, que haya disfrutado plenamente -por ejemplo- estas estupideces, reseñadas ya hace como dos años en este bodrio, o las sandeces que encuentra uno en esta otra página.

El primer ejemplo me atrae porque hace referencias cosas que me son familiares. Y el segundo porque en mi opinión así es como sería yo si no me reprimiera tanto (obviamente no con los mismos intereses, más bien me refiero a la agresividad y obscenidad).

¿Qué creen que pasaría si alguien mezclara entonces un poco de nerdismo en videojuegos, ingenio y cantidades impresionantes de insultos?

Uno obtendría esta abominación.

Las reseñas del AVGN (antes ANN) están en inglés, pero pues si juegan cosas antiguas deben saber o inglés o japonés... y yo no sé japonés, pero le hago al baboso con el inglés. Dichas reseñas son bastante divertidas (para mí, al menos) y -como mencioné hace unos párrafos- me hizo sacar lágrimas de risa al mismo tiempo que el dolor en mi cuerpo se incrementaba. Simplemente fue demasiado. Ahora son las 4 de la pinche mañana y no puedo dormir (siendo que me iba a dormir a la una) por la pinche gracia que me causaron sus pinches reseñas pinches. Pinches.

Bueno... me eché todo el rollote para terminar en esta basura (para variar), pero si les interesan los juegos y se consideran a sí mismos nerds, deben checarlo YA.

Ah... hablando de inglés, tengo que contar lo que me pasó cuando fui a hacer ese estúpido examen. Luego lo escribo.

lunes, junio 18, 2007

εὐδαιμονία

Sigo con eso de las entradas ofensivas, nomás que ahora no pondré algo de provecho. Más bien algo que pienso.

Hay personas que valoran mucho las virtudes clásicas, como valentía, honestidad, amistad y esas.

Hay otras que valoran mucho virtudes más bien intelectuales, como el ser lo más objetivo y razonable a la hora de decidir cosas, ser curioso y creativo... cosas así.

Yo no sé qué valoro más: por un lado, la parte romántica de mí me dice que tengo que ser virtuoso (incluyendo las cosas que puse antes), que tengo que aspirar a eso que se dice que Aristóteles llamaba εὐδαιμονία --no fijarme en lo material ni en las banalidades sino ser un humano así bien chido y todo; pero por otro francamente me gustaría estar toooodo el tiempo tirando la hueva. La imposibilidad de ambas situaciones me ha planteado el problema de buscar un balance entre ellas.

Antes pensaba que ser virtuoso era lo más picudo. Ya después me dí cuenta de que las demás personas no contribuyen exactamente a un ambiente que permita desarrollar -y usar diariamente- dichas virtudes. La vida exige intrigas, agresión y otras acciones que no son compatibles a primera vista con las virtudes. Mi reacción inicial fue tratar de conciliar las dos: quizá no son exclusivas, quizá son todas partes de una misma cosa.

Pero pienso que no: la honestidad, por ejemplo, se ve negada a la hora de hacer intrigas. Tan simple como eso. No es que "buuuueeeeno, es que eso es ser medio-honesto", no. Eres honesto o no (se oye medio drástico, pero pues en este caso no hay medias tintas... y tampoco pienso que sea "malo" ser deshonesto).

Mi segunda reacción -y la que manejo actualmente- fue el cinismo: pues sí, no voy a ser virtuoso, voy a usar a las personas para obtener mis fines -como huevonear- y ya (claro que hay que enfatizar que no pienso abusar de las personas o agredirlas innecesariamente, de hecho eso sería contraproducente). Después de todo, es lo que hace casi todo el mundo.

Como se podrán dar cuenta, como que me volví un poco maquiavélico. Que es lo que hace casi todo el mundo.

Después decidí realizar una reforma (por vanidad más que nada): no iba a andar usando a la gente sin su conocimiento sino decirle "miiiiira, tú haces esto y yo hago lo otro y todos salimos ganando". No podía estar muy tranquilo nomás usando a la gente y eso. Necesitaba que estuviéramos parejos para calmarme un poco.

Así es como llegué a mi estadio actual: tratar de interactuar lo menos posible con las personas en cuestiones "serias", sino nada más para echar relajo un rato y ya. Porque para cosas serias luego hay intereses incompatibles, sospechas, cosas de dinero (uuy, el demonio), etc. Cuando no me queda otra opción mas que tratar con otras personas sobre cosas serias trato de andar con cuidado y acabar el asunto lo más rápido posible. Hay excepciones a todo esto, claro, pero son muy pocas.

Eventualmente tendré que adaptarme de nuevo, supongo. Pero pues mientras tanto ha funcionado.

Bueno, eso es lo que traía en mente. Quizá alguno de ustedes ha pensado así en algún momento... de hecho me atrevo a afirmar que prácticamente todos han pensado de alguna de las maneras que puse al menos una vez --pero pues para que alguien lo admita está grueso: a nadie le gusta ser llamado un "ojete insensible" o algo así jajaja.

martes, junio 12, 2007

Gramáticas

Últimamente he pensado muchas cosas para escribir aquí, pero todas son ofensivas y -como ya he dicho antes- no quiero que esta madre se vuelva de esas de "el mundo apesta y todos son unos idiotas".

Así que veamos algo interesante: las gramáticas.

Primero hay que aclarar que no me refiero a la gramática del español. Sin embargo, lo que vamos a ver es similar a ella.

Una gramática no es más que una descripción de un lenguaje formal. Un lenguaje formal no es otra cosa que un conjunto de cadenas. Aunque estoy ya me está saliendo mal, porque quizá no saben a qué me refiero con cadenas.

Los que hayan llevado algo de programación y eso saben que a los arreglos de letras se les llaman 'cadenas'. Pero si no han llevado nada de esas cosas ¡no se preocupen! Les voy a llamar mejor 'palabras' (todos saben qué es eso ¿no?)

Entonces volvamos a empezar desde el mero principio para que me entiendan (en serio, es bieeeen fácil ¡no se preocupen!)

Primero tenemos algo a lo que le vamos a decir alfabeto, que no es otra cosa que un conjunto finito. Por ejemplo, el alfabeto que conocemos cumple esta descripción, pero también el conjunto {0,1} es un alfabeto. {a,b,c} es otro ejemplo de un alfabeto.

Una palabra sobre un alfabeto dado, entonces, no es más que un montón de símbolos (les pueden decir letras... nomás que los números a veces pueden ser letras y se hace una bronca, pero si le entienden no hay tos) de nuestro alfabeto pegados.

Volviendo a nuestro ejemplo del alfabeto normal, 'tengohueva' es una palabra, pero 'tengo hueva' no lo es porque el ' ' no es un símbolo de ese alfabeto (aunque se lo pueden pegar y hacer un nuevo alfabeto y no hay problema).

Otro ejemplo: sobre el alfabeto {0,1}, '000111' es una palabra, pero '00200' no lo es (sobre ese mismo alfabeto, claro). Pueden construir sus propios alfabetos y cosas así ¡es divertido! (ja).

Como dato así mamonsón, el conjunto de todas las posibles palabras sobre un alfabeto S se llama la "cerradura de Kleene" de S.

Entonces ya estamos en qué es una palabra ¿Dónde entran las gramáticas?

Tranquiiilos. Primero vamos a ver qué es un lenguaje formal: un lenguaje formal es simplemente un conjunto de palabras que se pueden formar con los símbolos de un alfabeto.

Y ése, mis estimados, es el punto fino.

¿Si tienen un conjunto de palabras, cómo podrían dar "reglas" para formar todas, sin tener que describirlas una por una?

Por ejemplo, si les digo que sobre el alfabeto {0,1} el lenguaje {0,1,00,11,000,111,...} ¿cómo le harían para describir ese conjunto sin tener que describirlo poniendo tooooodas las palabras? ¿Qué tal si son infinitas?

Una manera de describir ciertos tipos de lenguajes es con autómatas finitos. Pero pues eso es un poco más largo de contar y la verdad ya me está dando hueva... así que sigamos rápidamente con las gramáticas.

Una gramática (generadora) es una colección de "reglas de producción" que permiten ser sustituidos una y otra y otra y las veces que uno quiera antes de llegar a un "símbolo terminal" (o sea que cuando lo ponemos ya no podemos sustituirlo).

Esto de las reglas de producción está medio macabro, pero lo explico con ejemplos porque pues nos vamos a aburrir si comienzo con la cerradura de Kleene de la unión del conjunto de símbolos terminales con los no terminales y eso. Al que le interese le cuento bien.

Entonces, por ejemplo, para generar a ese lenguaje que puse arriba ({0,1,00,11,000,111,...}), las reglas de producción irían como sigue:

1. S -> 0A | 1B
2. A -> 0A | #
3. B -> 1B | #

Que en cristiano se lee así: "el símbolo inicial S puede sustituirse por 0A o 1B, A puede sustituirse por 0A o # (# es el símbolo vacío... nomás sirve para que pare el proceso, no aparece nada en la cadena), y B puede sustituirse por 1B".

Para que quede aún más claro, pongo un ejemplo: Supongamos que queremos generar la cadena '00000'. Entonces lo único que debo hacer es

- Empezar con el S y sustituirlo por 0A. Se ve así: S->0A.
- De ahí el A sustituirlo otra vez por 0A. 0A -> 00A.
- Otra vez sustituir A por 0A. 00A -> 000A.
- Otra vez. Cuatro ceros. 000A -> 0000A.
- Otra vez. Cinco ceros. 0000A -> 00000A.
- Ahora no debo sustituir el A por 0A (eso haría que tuviera seis ceros). Para eso tengo mi símbolo eso que me detiene la máquina y que, de pilón, no aparece en la palabra. Entonces tengo:

00000A -> 00000

Que es la palabra a la que queríamos llegar. Ooooohhhh.

¿Y para qué sirve esta basura, Aldo? Preguntarán ustedes.

Pues... entre otras cosas para el fundamento teórico del funcionamiento del software de computadoras, para teoría de grupos, fractales. Hay un montón de cosas que uno puede aprender con estas madres.

De hecho uno puede hacer dibujitos con gramáticas, usando un programa que hizo mi profe de Arquitectura de una Computadora (seguramente lo que se imaginaron NO es lo que vemos en mi materia) que hace curvas recursivas. Está aquí.

Ahí está su manual de uso, así que no comiencen con que "komo funsiona omglollzzzz?!".

Por ejemplo, si le ponen en el cuadrito:

axiom
A(90)
S(3)
y;

rules 1
y= zFzFzFzF;
end


rules 7
z=F S(S*(1/2)) -F-F-FzFzFzF+ ++f-- S(S*(2));
z=F-;
end


Les va a aparecer



Bueno. Si les interesa qué chido. Si no, al menos ya me relajé un rato y conté algo de provecho.

jueves, mayo 31, 2007

CU

No tengo nada en contra de la gente gorda. En serio, nada de nada. Me esfuerzo por ser una buena persona y no prejuzgarlos. Nomás que a veces no me sale.

Hoy (más bien ayer) fui a CU. Me levanté como al mediodía con muy buenos ánimos para ir a pedir informes sobre las maestrías de allá. Mi personalidad es de esas de que me gusta tener toda la información y todo, sin dar lugar a dudas o malos entendidos (las pocas veces que no lo he hecho los resultados han sido desastrosos... aunque seguro sólo es mala suerte), así que para mí no hay nada como ir personalmente a una escuela y pedir la información necesaria. Sobre todo si es algo considerablemente importante como esto.

En fin, salí de mi casa y pos ya llegué al metro. Ahí fue donde cometí mi primer estúpido error: bajarme en Garibaldi sabiendo muy bien que debí bajarme en Guerrero. No hay demasiada ciencia detrás de esto, señores, te bajas en Guerrero y de ahí a Universidad. Tan simple como eso.

Pero no, me bajé en Garibaldi. Y no sólo eso, llegué hasta el andén y todo, pero cuando el tren ya venía me cayó el veinte y me dije a mí mismo: "mí mismo, estás pero si bieeeen pendejo".

Deprimido por mi estupidez, recobré el buen camino y por fin llegué a la línea que me correspondía. Por la hora, presumiblemente, el vagón estaba lleno y pos ya ni modo, parado un chingo de estaciones (toda la línea menos cinco).

Pero después una señora se bajó y el tipo que estaba al lado del lugar no se quiso sentar, así que aproveché y me senté. Tenía que estar atento porque era uno de esos lugares de la esquina y esos están reservados para viejitos, preñadas o gente enferma -aunque no tenía letrero, pero pos se me hace medio absurdo no darle el lugar a alguien que veo que lo necesita. Todo iba bien, yo iba en mi onda y todo cuando se sube una señora...

No era cualquier tipo de señora. No señor, era una de esas totémicas cuyos brazos eran 4 veces los míos. No no no, estaba mal esa mujer. He aquí un diagrama sobre cómo era:

Diagrama de la señora


En estos casos mi cerebro rápidamente activa un mecanismo para que no comience a despotricar mentalmente en contra de estas personas así de "pinche cerda" o "cómo puedes tragar tanto maldita sea". En lugar de eso pienso que a)no es mi problema y que b)quizá tienen problemas con alguna glándula.

Decidí ignorar a la gorda (así le diré de ahora en adelante) y seguir en mi onda. Después ví que un niño de unos 9 años se subió detrás de ella y le iba hablando. Asumí que era su hijo. Justo cuando comenzaba a pensar de nuevo en mis cosas sentí una mirada penetrante y cuando volteo ¿adivinen quién me estaba echando una mirada asesina? Así es: la gorda. La gorda me estaba viendo con ojos furiosos, presumiblemente porque no me había levantado y dado el lugar. Sus ojitos me miraron fijamente, y decidí que ya había estado bien. Ya. No iba a tolerar que alguien -especialmente alguien así me echara esa mirada que mezclaba enojo, desprecio y repulsión. Yo también hice mi mirada asesina y eso fue suficiente para que la desviara. Al menos por el momento.

Ahora que lo veo para atrás, creo que exageré mucho en mi reacción. Digo, igual y la señora en el momento en que me vió se acordó de algo que la molestó y por eso hizo esa cara. O quizá esa es su cara de alegría o su cara seria. O quizá el asiento lo quería para su hijo. O algo. Sí, debí haber sido más cortés y haberle dicho algo así como "Señora, por mucha grasa que usted tenga, estoy convencido de que sus extremidades inferiores podrán soportarla. Tenga un buen día :-)", pero bueno, ya será para la próxima.

Para la siguiente estación de la que se subió, se bajó la persona que ocupaba el asiento que tenía enfrente. No lo he mencionado, pero el niño que les dije tenía tos. Estaba tose y tose el chamaco. Tanto que consideré la posibilidad de darle el lugar, siendo interrumpido por el fulano que se bajó. "¡Qué suerte!", pensé, "no voy a tener que pararme, el niño va a descansar, y todos salimos ganando :D"

No. Mal, mi ingenuo Aldo, la señora se sentó. El niño nomás la siguió y... no sé exactamente cuál es la posición que asumió. No puedo decir que era sentado (no podía por la... complexión de la señora), más bien estaba algo así como sobre la señora. Estuvo medio raro.

La señora -protegida parcialmente por su presunto hijo- comenzó a echarme más miradas satánicas desde su asiento; me miraba, la miraba, y volteaba. Y otra vez. Y otra.
Me estaba poniendo auténticamente incómodo por las miradas incriminadoras de la señora cuando decidió bajarse en Copilco. Hasta recuerdo el nombre de la pinche estación en la que se bajó.

Aaah perdón, olvidé un detalle: una señora ya más grande se subió en una de esas estaciones. Yo pensé en darle el lugar pero había lugares inmediatos que ella podía tomar, así que supuse que -si era su intención- podría sentarse. Pero esto no fue suficiente para la gorda. Si de por sí me echaba miradas asesinas, esto las encendió más. Estuvo cabrón eso.

Bueno, prometo no escribir nada más sobre gordos en esta entradad a partir de ahora.

Ala vérrrrtebra, todavía no llego a CU y ya escribí un chingo.

Total que llegué a Universidad y ahí estaba el Hidber esperándome (increíblemente llegué a tiempo... en mi reloj, en el de él iba siete minutos tarde o algo así). Y ya de ahí nos fuimos a la facultad de ciencias y todo tranquilo.

Fuimos preguntando para poder llegar a donde íbamos a pedir los informes y de paso poniéndonos tristes por lo chiquito que está FM, hasta que eventualmente llegamos a la oficina donde estaban. Había llegado el momento de cosechar el esfuerzo de haber viajado dos pinches horas y por fin enterarme de fechas, plan de estudios y detallitos así. Lo que pasó fue más o menos lo siguiente:

- Buenas tardes, disculpe: ¿podría darnos información sobre los programas de maestrías?
- La convocatoria ya está cerrada. Primer descontón.
- Sí, bueno... de todas maneras, nos gustaría saber los planes de estudio y las opciones que hay.
- Puedes checarlo en la página de internet. Eso me lo imaginé, vine para los detallitos que no se dicen en la pinche página
- Sí, bueno... ¿no los tiene impresos o --
- No. Señora en otro escritorio le dice que sí A ver si tengo unos aquí.
- Me da un pinche folletito que dice prácticamente nada "Gracias".

Y ya. Para eso hice mi pinche travesía de dos horas y cacho. Para que me dieran un pinche papelito que no me dió información que no supiera. Para terminar en esta basura escribí mi pinche obra épica sobre mis aventuras en el metro. Qué mamadas.

lunes, mayo 28, 2007

Tolerancia

¿Ustedes cómo entienden eso?

Hace rato me puse a pensar muy fuerte en qué pienso yo cuando leo o escucho esa palabra, pero nomás no pude ponerlo en palabras. Para variar, acabé buscándola en el diccionario, a ver qué habían pensado gentes más versadas que yo (espero), y encontré una que se parece a lo que tenía en mente: "Permitir algo que no se tiene por lícito, sin aprobarlo expresamente". Las otras tenían la palabra "respeto", la cual quizá nos metería en más problemas.

El chiste es que hay personas que se azotan si les dijera algo así como "tolero tus creencias". Contestarían algo así como "Uuuuuuy pues chingasatumadre, ni que necesitara tu aprobación", supongo.

Mi punto es que la tolerancia no es algo que uno tenga que decir, sino que es algo que uno nomás hace. Quizá por eso me cuesta tanto trabajo ponerlo en palabras.

O quizá es que es la una y media de la mañana y necesito dormir.

domingo, mayo 20, 2007

Biblioteca

Hoy recordé por qué casi nunca -desde que fui una vez a unos cursos en una biblioteca de Coatzacoalcos, y con la excepción de los primeros dos semestres en la carrera cuando quería ser responsable- me registro para sacar libros en bibliotecas.

(A veces se presentan dificultades: un libro medio rebuscado no lo tienen profesores, o no lo tienen compañeros, pero casi siempre no tengo necesidad de pedirle a alguien que me saque un libro... pero ese es otro asunto)

Estaba plácidamente hoy en la Biblioteca de México (o Ciudadela, aunque no sé cuál es correcto) cuando me dió curiosidad saber si tenían el segundo volumen de una obra que estuve leyendo y que se llama Logical Number Theory, de Craig Smorynski (si alguien lo tiene y sabe cómo conseguirlo sin que incurra en esfuerzos considerables de mi parte, dígame por favor :P). Fue en ese momento cuando tuvo lugar -más o menos- este diálogo:

- ¿Será que aquí tengan el libro de Smorynski?
- No sé, yo creo que sí.
- Humm... ¿Cómo puedo saber si lo tienen aquí?
- Aaahh pues muy fácil: sales y ahí donde estaban las cajitas buscas las--
- Uuuh. Ya me acordé por qué nunca me doy de alta en bibliotecas.

Hay otras bibliotecas que están más modernizadas (en FM podemos buscar en un catálogo por computadora, pero aún así hay que anotar un numerito en un papel y meterse a buscar el papelito... todo un relajo), pero siento que todavía no llegan a mi sueño guajiro de ver el libro en el catálogo y clic que se materialice el libro al lado tuyo. Tampoco quiero que nomás pensando ya se aparezca el libro enfrente... aunque estaría chido.

Ya medio se puede hacer eso imprimiendo cachitos del libro desde el catálogo. Pero pos soy mamón y quiero mi pinche libro al lado :P

martes, mayo 15, 2007

Miedo

Yo soy una nena cuando se trata de cosas sobrenaturales (como fantasmas, apariciones y etc.).

He analizado bastante a fondo por qué me espantan tanto. He encontrado bastantes teorías y todo, pero aún así el miedo persiste cuando me quedo sugestionado por una película o una historia que me hayan contado.

Y pues, vamos a ver qué onda con esto de los fantasmas ¿sale?

Primero: ¿cómo es que los fantasmas pueden mover cosas?. Mi pregunta tiene una motivación física: si un ente puede mover objetos y afectar equipo eléctrico -como suelen mostrarlos- entonces debe sacar energía de algún lado, de acuerdo a la teoría que se conoce no puede nomás manufacturarla de la nada de manera perceptible. Esto puede tener varias salidas, o el fantasma en verdad genera energía "gratis" (¡excelente!), o transforma energía que hay en energía para mover los objetos y eso (también excelente, así podríamos investigar algo que parece bastante barato).

Otra es cómo le hacen para atravesar paredes y todo. Si nomás son "energía", es más fácil de explicar este fenómeno. Pero plantea una nueva pregunta: ¿Cómo coordinan la energía? Es como en nuestro cerebro, pero la diferencia es que nosotros tenemos que comer, dormir e ir a calabacear, y no mencionan a veces este tipo de fenómenos en los fantasmas (excepto cuando absorben almas y ese tipo de jaladas, lo que me remite a la primera pregunta). Si no son nomás "energía" ¿qué? ¿se aguadan y pasan por los poritos de las paredes y puertas y ventanas y loqueseaquehayaenmedio? ¿se teletransportan?

No mamen, como que tienen demasiadas ventajas.

Por otro lado, y esto tiene un corte menos serio, ¿a los fantasmas de las películas no les dará miedo o preocupación que las personas que matan eventualmente se vuelvan fantasmas y les den guerra? Esta pregunta se me ocurrió desde la preparatoria o algo así. Algún día le voy a escribir a alguien que haga historias de fantasmas y a ver qué contesta.

El chiste es que las películas de terror me dejan todo acelerado y luego a la hora de dormir ahí estoy todo sugestionado y pos me quedo con el ojo pelón. Cuando era más chico y vivía en Coatza me iba a dormir con alguno de mis hermanos (tan nena era), pero ahora que estuve aquí en México y me quedo solo durante días y veo cosas de terror tengo que improvisar.

Por otro lado, soy difícil de espantar así de "¡BU!" (cientos de horas jugando Wolfenstein, Blood y Doom logran eso con facilidad). Estamos en las películas de sustos y sale el pinche espectro o lo que sea de madrazo en la pantalla y la gente "Aaaayyyyyy"; si la escena fue muuuuy bien ambientada entonces lo más que he llegado a hacer ha sido algo así como un brinquito. Pero pos normalmente me quedo con cara de "Chaaale".

En los juegos es mucho, mucho más fácil que me espante (FEAR sólo espantó en una vez y la expansión en 3 lugares más o menos, con estas cifras se pueden dar una idea de qué tan espantable soy... si saben de juegos); principalmente porque juego solo y como a las dos de la mañana. Puntos extra si se va la luz mientras estás jugando -éso, ÉSO, sí es de los sustos más cabrones que me han dado. No son de "¡BU!", sino como que te agarra un poquito de pánico porque estás todo sugestionado (y solo, para acabarla de fregar). Bendito sea mi DS.

lunes, mayo 14, 2007

Maestro

Acabo de tener una Epifanía:

A las personas, independientemente de su estrato intelectual, les vale si alguien o no cimenta sus argumentos en algo lógico siempre y cuando no "pierdan" en los argumentos. Yo antes -ingenuamente y mal acostumbrado por lo que he visto en foros de ciencia y todo eso- pensaba que alguien con suficiente preparación y desarrollo intelectual podría entender lo que le dijera basado en argumentos lógicos (entiéndase que aquí abuso de la palabra "lógicos") pero veo que no. Por lo visto existe una función entre qué tanto alguien está dispuesto a aceptar la validez de sus argumentos, y qué tanto no está dispuesto a "perder" el argumento.

Ahora, he sido muy vago en eso de "perder", así que merece una clarificación: Cuando digo que no quieren "perder", me refiero a que empiezan un argumento -que al menos parece- lógico y que después cuando ven que no es consistente con las observaciones efectuadas hasta el momento, comienzan a divagar y a tratar de evitar el bochorno que les provoca darse cuenta de que acaban de decir una sandez (no voy a especular por qué hacen eso, aunque seguramente es una cuestión de autoestima).

Hay que decir las cosas como son, cuando alguien está ensalzado en una conversación con alguien como yo más le vale tener algo en qué sustentar sus argumentos. Algo por lo general de más valor que "porque yo quiero". Normalmente los juicios de esas personas tienden a decaer por este tipo de "razones" en sus argumentos. Pero esto que acabo de mencionar es más bien un criterio personal para discriminar observaciones que sean medianamente aceptables de las que son fruto de sus propias frustraciones.

Por supuesto, como en todo, hay excepciones y es bueno siempre tomar en cuenta observaciones por absurdas que parezcan (como que no se vale despreciar todo todo todo sin darle una evaluación primero... aunque es tentador).

Normalmente las personas que no toman en cuenta argumentos lógicos tratan de llevar al extremo dichos argumentos -como para mostrar qué tan ridículos son- pero muchas veces lo hacen con tan poco ingenio que lo que acaban haciendo es invalidar (o como se escriba) su propio ejemplo.

Quizá, si tuvieran suficiente talento, podrían hacerlo de tal manera que fuera consecuente con sus argumentos. Pero no me he encontrado con alguien así.

Seguiré buscando a quien en verdad pueda hablarme así. Te sigo buscando, Maestro.

sábado, mayo 12, 2007

Intro

Cuando escribí lo de la saliva, no mencioné un detalle muy importante: cómo es que descubro el que estoy babeando, o que estoy privado o algo así.

Normalmente tengo música puesta en la computadora (por ejemplo, ahorita tengo el Piano concerto #2 de Chopin); esto es porque necesito algún ruido ambiental para comenzar a realizar alguna actividad, ya cuando estoy inmerso en ella no es necesario (ese es el punto, como veremos).

Entonces, normalmente tengo música. Normalmente rock, de hecho. Es así que tengo música, comienzo a jugar o a leer o algo y está sonando una rola... por alguna razón me desconcentro de mi actividad y ¡pum! Ya va a terminar otra rola.

No es tanto que no las escuche, sino que no estoy completamente consciente de ellas. Hay veces que estoy moviendo la pierna al ritmo de la música, pero no sé cuál es la que está sonando. Ahorita me pasó -y es por lo que estoy escribiendo eso- y decidí plasmar esto antes de que se me olvide. De nuevo.

Estaba leyendo un libro y la rola que estaba sonando era una de Blind Melon. El libro es bastante ameno. Decido suspender la lectura y ya está el piano en friega. Chale.

miércoles, mayo 09, 2007

¿Ya ves?

Por eso no me gusta hacer ejercicio. Ora había aguantado más de una semana haciendo ejercicio, y sin enfermarme de la panza ni nada.

Y que me da osteocondritis. Nada grave o letal, pero pos tuve que suspender esa onda.

Mal, mal.

(No comiencen a regañarme con que "no calientas" o "no sabes hacerlo bien", porque tenía mi instructora ; )

sábado, abril 28, 2007

Súper

Las matemáticas son chidas. No son mi cosa favorita, pero me gustan mucho.

(Me refiero a la ciencia, no a las chicas que estudian matemáticas... aunque también hay al menos una de esas que me gusta :P)

Total que en lo que nos enseñan en mi escuela vemos cosas muy interesantes. Empezamos desde cosas que pudieran parecer obvias (que 0 + x = x, por ejemplo), pasando por cosas ya más locochonas (grupos y de ahí todo para arriba califica como locochón, aunque no necesariamente muy difícil), cosas también con nombres vaciados (el ANIQUILADOR, por ejemplo, o "vecindad del infinito"), y así nos la vamos llevando.

El chiste es que de TODO lo que he visto en la escuela hasta el momento, lo más bello con lo que me he encontrado es una superestructura.

La definición es de lo más simple que hay (o eso pudiera parecer a simple vista), tanto que alguien de prepa podría en principio al menos saber a lo que me refiero con lo siguiente:

- Agarren un conjunto. Vamos a ponerle conjunto S.
- De ahí agarren S unión el conjunto potencia de S (o sea el conjunto de todos los subconjuntos de S). Al conjunto resultante le llamamos S_1.
- Hagan con S_1 lo mismo que hicieron con S (eso de la unión) y a lo que les dé le llaman S_2. Y así lo hacen para cualquier número natural.
- Definimos la superestructura V(S) como la unión de todos los S_n.

La potencia de esta chiva es increíble. En verdad increíble que algo de apariencia tan inocente sea tan poderoso. Me impresiona cada vez que pienso en ello.

miércoles, abril 25, 2007

Memoria

Hace rato me puse a pensar en eso de que uno recuerda cosas. Y me asaltó la pregunta: ¿Cómo le hacemos para "rebobinar" hasta un momento justo y comenzar a extraer la información asentada en el cerebro?

No me refiero tanto a procesos neurológicos, sino cómo le hacemos para decirle al cerebro que vaya al momento preciso. Mi pregunta es en el mismo sentido que esta otra: ¿Cómo le hacemos para decirle al brazo que se mueva?

Me refiero a la conexión entre la conciencia y los procesos químicos que ocurren, por supuesto. No comiencen con que las neuronas mandan impulsos eléctricos y demás (que es lo que me contestan por lo general, y que medio sé de tanto leer de esas ondas).

lunes, abril 23, 2007

Bebés

¿Alguien sabe por qué los bebés recién nacidos y hasta algunas semanas después se la pasan con la lengua medio de fuera y babeándose los labios? Le he buscado pero no llego a algo concluyente.

lunes, abril 16, 2007