jueves, julio 17, 2008

K px

Uno de mis prejuicios tiene que ver con la lengua (escrita, aunque también tengo problemas con la hablada). Tiendo a pensar que la gente, si escribe mal, como que es zopenca. Claro que para que se detone esa reacción se necesita que escriba considerablemente mal. Por ejemplo: a todos se nos va una tilde de cuando en cuando, o se cambia una s por una c, y en estos casos no me pongo mamón. La puntuación y eso a todos nos cuesta trabajo -a mí me cuesta mucho- y tampoco la hago de tos. Es cuando la abominación del lenguaje se vuelve deliberada cuando más me duele.

Con abominación deliberada quiero decir dos cosas: la primera es que la persona en cuestión alguna vez haya escrito mal una palabra, y le hayan dicho la manera correcta de escribirla, y siga escribiendo mal dicha palabra; y la segunda es que sepa las reglas de ortografía y gramática y, aún así, prefiera usar... formas alternativas, digamos, de escribir.

Esto crea un conflicto en mi mente: por un lado, pienso que el lenguaje es una convención, y que por lo tanto está sujeto a caprichos de la sociedad, por más absurdos que me puedan parecer. Por otro, pienso que no debería ser así. Como que debería haber algún lineamiento no tan veleidoso. Por supuesto, el que yo propusiera un lineamiento al que se tuvieran que someter las personas sería un ejercicio en soberbia que me supera (aunque me digan que soy soberbio).

Este conflicto lo calmo a veces pensando que los cambios más benéficos son los que al final van a sobrevivir, pero viene la pregunta: ¿cuáles son los cambios más benéficos?

Como este asunto de escribir "k" en lugar de "qué". Cierto es que "k" es más corto que "qué", pero si vamos a escribir "que" en lugar de "qué" la única manera de distinguirlo va a ser a partir del contexto --no que nunca hagamos eso, con la costumbre que tiene la mayor parte de las personas -creo- de escribir mal. Pfff. No quiero seguir pensando en eso, no.

De nuevo aparece el conflicto.


(Las palabras "correcto" y "mal" se usan respecto a esas reglas que se ven en la escuela para escribir bien)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Al fin alguien piensa igual que yo! maldita sea odio a esa gente que reduce las palabras... Jaja bueno tal vez no odiar pero si detestar ya bastante con la forma en que la sociedad joven se ha ido denegrando con eso de los "emos" y cuanta onda salga, como para que le den en la torre a la redaccion española... pero bueno despues de haberme desahogado jaja.
"Salu2" jaja

quark schiz dijo...

Me gustaría ver un estudio correlativo al respecto, pero mi experiencia constata que la gente que escribe demasiado mal... sí es zopenca.

La puntuación también esta sujeta a subjetividades; el comerse tildes es pasable y entendible. Pero las reiteradas atrocidades ya dan una pista.