¡Que no es un lamento, chingado!

El otro día que hablé con mi mamá, me preguntó que cómo estaba y yo le mencioné que no podía dormir bien. Me contestó que dejara de jugar la computadora. Ja, mi mamá me conoce tan bien... es curioso cómo adivina cuando me pasa algo. Te quiero mucho, mamá.
Pero esta vez no puedo dormir, y no es por jugar. Es por... la verdad ni yo sé, pero si hay algo seguro es que no he jugado esta noche, jajajaja. Como mencioné en El Azotón, me siento mal y, ahora que lo pienso mejor, es por una suma de circunstancias:
-Reprobé Análisis Matemático. Sí, ya sé, yo también pensé lo mismo cuando ví las calificaciones: "WTF!?". No es que sea el alumno más responsable y estudioso, pero la verdad no tengo (tenía) por qué reprobar esa materia, si en el primer examen no me fue mal, y en el segundo no pude haber sacado menos de cinco. O al menos así lo recuerdo. El lunes le pediré al profe mis exámenes, igual y no recuerdo bien y sólo hice un problema de los cinco del examen(jajajajaja, ah... necesitaba reírme).
-Mi tarjeta de video ha sufrido algunos daños debido a mis experimentos... probablemente piensen que estoy enfermo porque me afectan esas cosas, pero pues... humm... véanlo como alguien que se pone triste porque su estrella de se enferma o muere. No es lo mismo pero, bueno, véanlo así.
-Cada vez pierdo más interés por la carrera. Eso no es lo mismo que me deje de gustar la física, o las matemáticas, digamos que el sistema y yo nos estamos volviendo menos compatibles :P.
-Soy un zopenco, tiendo a alejar todo lo bueno que me pasa. Muy gruñón, también.

Ojo, esto no es un lamento, sólo un desahogo (los uso de formas diferentes).
Yo soy el responsable -de alguna manera, al menos- de las cosas mencionadas, y ahora voy a lidiar con las consecuencias. ¡A huevo!